José Alvarez, influencer del campo.
“No hay libertad individual sin libertad económica”, José Álvarez, Ingeniero en Producción Agropecuaria, es productor en Argentina y Estados Unidos.
Con 51 años se reconoce trabajador del campo de toda su vida y alguna errática participación en un Directorio de empresas de otro rubro. “Básicamente toda mi vida me dediqué a la producción”, comenzó contando el productor agropecuario reconocido por sus intervenciones en la red social X.
Su mirada sobre Argentina es particular, no muy diferente a la de otros –como él-, que quieren un cambio de verdad. Álvarez puntualiza que todavía no hay una clara tendencia al resurgimiento del país, “digo resurgimiento porque el país fue grande alguna vez. No fue un país pobre, pero ahora, va lentamente transitando hacia la prosperidad. La Argentina fue próspera y después quedó en una meseta durante décadas”.
Su padre vino de España y primero se dedicó al comercio, fue empleado y hasta lava copas, como muchos de esa Argentina de otro momento, empezó a progresar y junto con otros cuatro socios, entre cinco, compraron un negocio y empezaron con la actividad gastronómica.
Con la actividad agrícola comenzó tímidamente un tiempo después a fines de los 70, de a poco, porque el primer campo era chiquito, “a mí me tocó dedicarme solamente a esto, la agricultura, él tuvo las dos actividades (agricultura y ganadería), con la política del ahorro y reinversión durante muchos años. Fue comprando propiedades chicas, pero tratando de agrandar la explotación de esa manera.
“el resultado de alquilar campos para producción, sobre todo en los últimos años, es bastante neutro. Haciendo todo bien, ya sea por el clima, por los mercados, o por las intervenciones estatales, lo cierto es que la gente, en muchos casos, arrendando, se contenta solamente con ganar de la inflación. Y no con ganar genuinamente dinero”.
¿Qué te imaginas de esta política actual?
“Yo apoyo a toda fuerza, política que busque justamente el progreso del país. Como lo entiendo yo, mediante la libertad económica, siendo esta, el instrumento necesario para el resto, es decir, para el ejercicio del resto de las libertades individuales. Es decir, no hay libertad individual posible si no hay libertad económica también para las personas”.
En cuanto a su parecer del sector agropecuario, José Álvarez estima que le falta mucho para normalizarse, sobre todo en el comercio exterior, ya que el mismo lleva un cuarto de siglo prácticamente distorsionado por completo, con algunos momentos de alivio, hasta que impusieron las retenciones en el 2002.
“desde que impusieron las retenciones en aquellos años, tristemente apoyada por una parte del sector ya que no se le consultó a todo el mundo, y a los que se les pidió su opinión estuvieron a favor, después prácticamente no hubo normalización, y ahí se nos fue la mitad de la vida viendo cómo el mercado agrícola, la fuente principal de divisas del país, la del ochenta y cinco por ciento de los dólares que entran y a su vez se quedan en Argentina, prácticamente, no tuvo nunca un momento de libertad plena para exportar”. Puntualizó
El reacomodamiento de la economía y la liberalización del cepo, era uno de los ítems más esperados por el sector agropecuario en relación directa con los insumos, fertilizantes y agroquímicos, en esto Alvalez hace una para para explicar que, “cuando seguis agregando unidades de insumo, la respuesta cada vez es menor, pero cuando uno tiene distorsionada la relación de precios entre insumo y producto, ese punto ideal de quiebre en el cual uno deja de agregar insumos, está mucho más corrida hacia el punto de origen que hacia el potencial que tienen nuestros suelos, es decir, si uno paga el fertilizante al valor internacional, que es lo que corresponde, y agrega los fletes, impuestos y otros gastos, que es algo que no debería ocurrir con un insumo que va directamente a a producción, por otro lado recibe menos que el precio internacional de los productos que exporta, entonces la relación de precios hace que el ideal económico esté disociado del ideal agronómico, y la gente se ve obligada a fertilizar menos, a aplicar menos tecnología, y no incurrir en la inversión de bienes de capital, como por ejemplo el riego”.
¿Por qué se riega poco en nuestro país?
“La Argentina, tiene un potencial de dieciséis millones de hectáreas que podrían tener riego total y complementario, es decir, en zonas donde, llueve bien, y por razones climáticas en el mismo se produce un déficit hídrico marcado, como pasó en los últimos tres años, debería tener un equipo para salvar la producción y no lo tiene. Nosotros regamos solamente dos millones de hectáreas de las 16 posibles, prácticamente poco más que el 10 por ciento, 12 o 13, y deja de producir mucho, lo que lleva a una variabilidad interanual tan grande que hace tambalear a los gobiernos”.
Ante este panorama ¿Cuánto creció el país?
“Si tomamos los últimos 25 años, producíamos la misma cantidad de soja que Brasil, hoy ellos producen, dos veces y media más, es decir, alrededor de 175 millones de toneladas, esto sucede por producto de la falta de capitalización de las empresas”
Cepo
La liberalización del Cepo cambiario, fue uno de los temas que trascendió a mediados de abril la atención y acaparó la mirada de todos, pero si bien beneficia a algún sector de la industria, está más orientado al argentino promedio con capacidad de ahorro o de compra de la moneda extranjera, pero las empresas continúan de la misma manera, ¿cómo quedan ellas ante esto?.
“para las empresas es bueno cuando reparten de dividendos a sus integrantes, entonces, ellos serán los que puedan acceder, al dólar unificado, y después serán los que aporten capital en la empresa, o por lo menos yo imagino que será así la operatoria”.
Volviendo al tema producción y clima, José Álvarez, que además de producir en Argentina conoce otros territorios, asegura que en nuestro país, teniendo un ambiente que es uno de los tres mejores del mundo, perdimos el tren y la competitividad por las cosas que han pasado, por ejemplo, frente a Brasil con sus ambiente mucho más caro de producir y mucho más riesgoso para mantener en el tiempo, con suelos y climas tropicales con multiplicidad de enfermedades, con multiplicidad de insectos y plagas.
Retenciones
¿Las dejamos como están, las volvemos para arriba, las sacamos definitivamente?
“Hay que hacer una diferenciación, una cosa es estabilizar la economía y otra cosa es dejarla crecer. La economía no va a crecer jamás mientras haya derecho a exportación, lo cierto es que el sector agrícola y pecuario, están a tiro de duplicar la producción en muy poco tiempo, solamente con conservar la relación de precios internacionales, es decir, con un esquema normal de comercio exterior, es decir, de 130 o 140 millones de toneladas que producimos podrían ser 300 perfectamente”.
¿Ves la luz al final del túnel?
“yo creo que estamos en camino de eso, la opción que tomó la sociedad fue la correcta. De eso no hay ninguna duda, uno espera que la cosa mejore mucho más, es lo que tenemos que hacer y decirlo y nadie tendría porque ofenderse”.
Para Álvarez, productor del agro, como para tantos otros, estamos en la dirección correcta, “por lo menos para este sector”, donde hay que establecer la economía, donde no es que la política la que hace que la economía crezca, la economía no crece por la política, la economía la dejan crecer o no la dejan crecer.
“Lo que tiene que hacer la política es dejar que crezca la economía y para dejar que crezca la economía tiene que hacer que el dinero que produce la gente financie, por un lado, al Estado lo que sea necesario, pero que después quede en manos de la gente, porque la gente es la que mejor sabe multiplicar la riqueza que primero creó. Nunca el Estado, sea del color político que sea, va a estar más capacitado que la gente para multiplicar la riqueza que la misma gente creó”. Puntualizó José Álvarez.